Hola amigos, como prometí y parafraseando a Josep Tarradellas (el de la Generalitat, no el del fuet), JA SOC AQUÍ.
O lo que es lo mismo, que aquí he venido y aquí me quedo, entre la tecla.
Luengos tiempos ha sus prometí a todos que mis meninges estaban trabajando en asuntos interesantes, que huelga decir se me han olvidado todos, por lo que procederé a inventarme nuevos.
Hoy, y que conste que este tema ya lo he comentado en cónclave, me han dado los resultados de unos análisis de sangre y demás fluidos corpóreos que me hicieron nada más terminar el verano. Yo, ajeno a ello, disfruté la época estival como merece, esto es, con la celebración de costilladas varias y paelladas en honor a san Crustáceo, amén de chuletones, sardinazos, morcillas, canutillos, chocolates, champanes, pacharanes, coñases y un largo etcétera que es como para dejar en gayumbos al de SuperSizeMe. Pues bien, al igual que éste, los análisis de sangre HAN CANTAO.
Y lo que han cantao ha sido nada más y nada menos que estoy de ocho meses, a juzgar por mi apolíneo perfil. Mas no obstante y dado el hecho irrefutable de que yo, en condición de macho varón, no puedo engendrar ser alguno, lo que denota mi perfil es a un señor tripero ejemplar. Y he aquí el hecho diferencial, y es que, acojonarse, me han salido unos valores como a un deportista de élite pero sin chutarse. Ni siquiera tengo colesterol, ni azúcar, ni triglicéridos, ni ná de ná.
Y para más inri (Iesus Nazarenus Rex Iudaedorum-Jesús Rey de los Judíos), lo he comparado con un compañero de curro bastante más esbelto que yo, y encima más joven que no más guapo. Y le gano por goleada. La verdad es que me he sentido agusto; además de ponerme fiemo a comer sin privaciones, saco unos resultados como la telemetría de un Ferrari. Esto es como no estudiar nada y sacar un 10 en el examen, difícil pero no imposible (eso sí que no se han documentao casos).
Bueno, tras el alegrón que me he llevado (es el mejor análisis de sangre de mi vida, siempre he tenido algo fuera de límites), he decidido seguir la dieta como hasta ahora, y me he comido una ensalada de pepino y un bonito en fritada que sólo le faltaba dar palmadas en el plato. Por cierto, es temporada, está muy bueno y barato (si 9€/kg se puede llamar así).
Así que a los que tengáis alguna lorcilla que otra no preocuparsen, que eso lo genera el cuerpo solo, en previsión de épocas de escasez. Ya se irán, y si no, ahí se quedarán.
Otro día ya os contaré los tipos y clasificaciones de las lorzas, que tengo de todas.
Nota del editor: Como el amigo Kampfwagen había olvidado poner un título a su entrada, la he añadido yo.
viernes, 23 de octubre de 2009
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Exageras más que hablas. Barriga es lo de un servidor, o la de Spiderman. Nuestras buenas cervezas nos ha costado. Como mides más o menos lo que yo, cuando llegues a 90 Kg, me dices... porque entonces ya solo te llevaré 10Kg de ventaja.
ResponderEliminarDesgraciadamente, mi colesterol lleva años desfasando. Lo demás, todo perfecto. Alguna vez hasta me hubiesen echado del Tour por exceso de hematocrito.
Me alegro de que estés de vuelta. La verdad es que sin tí por aquí, y dada la apatía del resto de la cuadrilla, me daba bastante pereza escribir nada.
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